1 corintios
pues habéis sido adquiridos por precio; glorificad, ya que, a Dios en tu cuerpo y en tu espíritu, los cuales son de Dios. Pues habéis sido adquiridos por precio; glorificad, pues, a Dios en vuestro cuerpo y en tu espíritu, los que son de Dios. “mas el que fornica, contra su propio cuerpo peca” (v. 18c). O sea un pecado contra el cuerpo, igual que profanar el templo de Jesús sería un pecado contra el templo. “¿Quitaré pues los integrantes de Cristo, y los haré integrantes de una ramera ? Anote la similitud entre la palabra griega para fornicación y la palabra para prostituta .
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El Cuerpo Es
Los alimentos para el estómago y el estómago para los alimentos, pero a ambos los destruirá Dios. Y el cuerpo no es para la fornicación, sino más bien para el Señor, y el Señor para el cuerpo. PUES, debemos glorificar a Dios con nuestros cuerpos. Esto acarrea todo tipo de implicaciones para cristianos el día de hoy. Sugiere que debemos vestirnos modestamente y no de forma provocativa. Sugiere que debemos cuidar la salud de nuestros cuerpos con el mismo precaución que mantendríamos un templo.
Todo pecado que el hombre cometa está fuera del cuerpo, pero el que fornica, contra su cuerpo peca. Con este versículo puedes entender por qué razón no tienes paz en tu corazón. Si no vives complacido de ser comprado por Jesús, si no has dejado de gobernar tu vida y cedido tu trono a aquél que pagó por tu vida, NO PODRÁS vivir en paz.
Debemos Glorificar A Dios Con Nuestro Cuerpo (1 Corintios 6:12
Un hombre de mediana edad, vestido con un traje verde de tres piezas, paseaba en dirección oeste hacia nuestra casa en la parte norte de la calle 18. Tenía algo amarillo en su mano derecha, quizás una piel de plátano o una bolsa de patatas fritas. Mientras paseaba, miraba a su izquierda, hacia el otro lado de la calle.
1 corintios
La segunda razón por la que debemos combatir para liberarnos de toda esclavitud es porque la libertad es verdaderamente extraordinaria. ¡Dios dijo todas estas cosas por nuestro bien! ¡Están ahí a fin de que podamos darnos cuenta de que supervisar nuestro cuerpo no es un tema menor! “Todas las cosas me son lícitas, ¡PERO YO NO ME DEJARÉ DOMINAR POR NINGUNA!
Pablo utiliza la imagen del templo de Jerusalén cuando les dice a los cristianos corintios que sus cuerpos son el templo del Espíritu Beato. Hay otra palabra griega para templo, heiron, que comprende todas las instalaciones del templo , pero la palabra naos se refiere al santuario interior, el Sagrado de los Sagrados, la morada de Dios. ¿O no saben que su cuerpo es templo del Espíritu Santurrón, que está en ustedes, el cual tiene de Dios, y que no son de ustedes?
Con estos versículos finalizamos el capítulo 5 de 1 Corintios y en ellos el apóstol Pablo toca el pecado de la fornicación. Con estos últimos versículos Pablo se estará ingresando a los inconvenientes que hace la fornicación que va a ser el tema del capítulo 7 de esta carta. Pues habéis sido adquiridos por precio; glorificad pues, a Dios en vuestro cuerpo y en tu espíritu, los cuales son de Dios. Por cuanto fueron adquiridos por precio, glorifiquen ya que a Dios con su cuerpo y con su espíritu, los cuales forman parte a Dios.
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Una aceptable metáfora quizá sería un violinista profesional que visita la orquesta de una escuela secundaria. Los estudiantes todavía aprenden las reglas de la música. Por mucho que prosigan las reglas, la música de esta orquesta seguiría siendo de principiantes. El violinista profesional, por otra parte, ya ha internalizado las reglas y tiene la libertad de dejarse asesorar por el espíritu de la música en lugar de las reglas que la gobiernan. Su entendimiento maduro le deja realizar fluir la música bellamente.
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- Se ha pagado por vosotros un buen precio.
- Pero el cuerpo no es para la afornicación, sino para el Señor, y el Señor para el cuerpo.
Cuando Dios los salvó, en realidad los adquirió, y el precio que pagó por ustedes fue muy alto. De ahí que deben dedicar su cuerpo a honrar y agradar a Dios. Por ende, honren a Dios con su cuerpo. Todo pecado que comete el hombre queda fuera de su cuerpo; mas el que fornica, peca contra su cuerpo. 13 La comida para el vientre y el vientre para la comida.